4. Hasta entonces el vidente habia estado entre las actividades de la naturaleza psiquica
El poder y la vida, que son la herencia del Hombre Espiritual, habian estado cautivas entre las actividades psiquicas. En vez del puro vivir en lo Divino, sembraba el violento, combativo egoismo, la discordia entre los hombres; en vez de la luz de una vision pura, la inquetud de los sentidos y de la imaginacion; en vez de la alegria espiritual, de la integra alegria del ser purola propia indulgencia para con nuestro cuerpo y nuestra mente. Todas estas fuerzas son reales, pero desviadas de su legitima naturaleza y de su verdadero fin.
Ellas deben ser desembarazadas, como la gema de su cuarzo, como el juego de la caña, pero pacientemente, sin violencia destructora. Los poderes espirituales deben ser redimidos de las redes psiquicas.
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